Hito geológico muy popular en el pueblo, está situado a lo largo del recorrido del GR-24, que conecta Ojos Negros con Villar y Peracense.

Se trata de un modesto pero singular cortado calizo, en el que se ubica la entrada a una de las cuevas o grutas kársticas que podemos encontrar en el territorio.

Se accede a pie desde el pueblo, en unos 40 minutos.